Cada día algo mejor, la vida Alcampo.

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Cada día algo mejor, la vida Alcampo.

La interrogación con la que parte el anuncio es retórica, la respuesta esperada es: «claro que sí, a peor». Y la marca nos lanza el mensaje de que lo saben, desde aquí añadimos, lo saben porque son ellos mismos, entre otros, los que dentro de la dinámica del mercado (más beneficios menos costes) han inducido y producido estos cambios.Han vendido productos que han cambiado la alimentación de niños y mayores. Ahora bien, eso ha producido problemas en la salud infantil y ahora nos ofrecen la solución a los mismos.

Es interesante y muy habitual, dentro del mercado de productos y servicios en el que se desenvuelve nuestra sociedad, que alguien produzca un problema y luego te ofrezca la solución. Es una buena manera de alimentar el negocio, si tienes un problema que yo te he producido y te ofrezco la solución, gano mucho, eres mi cliente siempre.

Pero el mercado cambia, y cada vez se aceptan menos los mensajes de plástico, dirigidos al público en general. Los clientes informados cada vez aceptan menos este tipo de prácticas y las empresas inteligentes lo saben.

Aquellas personas que crean realmente que la alimentación de sus hijos debe ser diferente, buscarán una alternativa fuera del control del que les ofrece aquello que no les gusta. O eso creo, aunque a veces los humanos tenemos contradicciones. Hay mercado alternativo y la salud es un campo inmenso para explorar.